jueves, 21 de enero de 2010

MICROCUENTO: DESPISTE


DESPISTE


Me acerco y anoto sus nombres. Con esa dichosa manía que tienen de escribir todo con esa letruja enana me tengo que acercar tanto que hasta podría imprimirse en mi frente. Pero, luego ¿cómo los leería? Je, je, je. He de saber en qué estaciones me he subido y bajado para poder volver antes de que cierre la residencia. Por cierto ¿qué hora será ya? Juraría que me puse el reloj de muñeca. ¡Ay, otra estación! ¿Dónde diablos estará el papel donde las apuntaba? Bah, ya me acordaré cuando regrese. A todo esto… ¿dónde es que iba yo?


Nacho Hevia

miércoles, 13 de enero de 2010

MICROCUENTO: A UN ESPACIO DE DISTANCIA

A UN ESPACIO DE DISTANCIA

Ni subido a una escalera conseguiría besarte, porque cada vez que llegase a alcanzar la hornacina desde la cual me miras te alzarás siempre a un espacio de distancia. Y de tanto seguirte esta escalera apurará hasta el extremo, uno a uno, tecla a tecla, tiempo a tiempo, paso a paso, sus escalones; y será únicamente un conflicto de traviesas sin destino, sin equilibrio, sin muro donde apoyarse. Ni subido a una escalera, doce o trescientas, conseguiría besarte, que tu cuerpo es sólo cuerpo que se vence bajo tierra y tus labios una exhalación a tanta altura como hasta donde el aire deja de ser aire.

Nacho Hevia