TE QUEDAS VACÍO
Para que nadie se entere de que me he marchado cierro las palmas de tus manos sordamente, consumo lo que te resta de vigor devolviéndote al frío, paralizo tus párpados como cuando un reloj decide dejar de adelantar segundos y me arrastro con el aire que liberas, quedándote vacío.
Para no tener que ser yo quien les diga que me he ido, dejo que se haga cargo una máquina con su continuo pitido.
Para no tener que ser yo quien les diga que me he ido, dejo que se haga cargo una máquina con su continuo pitido.
Nacho Hevia
FOTO: Nacho Hevia
7 comentarios:
Que placer llegar y encontrar tu micro cuento...
Interesante dejar a otros las despedidas...a mi nunca me ha dado resultado!
Los vacíos y las despedidas, qué fuerte.
Tu relato es maravilloso y transmite muchísimo. Me ha encantado leerlo. Te extrañaba.
Un abracito.
¿De regreso con una despedida?
Interesante micro cuento.
Otro abrazo.
Gabriela, Marina, Pará... Gracias por leerlo con el corazón...
Lo terrible es cuando nadie se da cuenta de que te has ido... creo que a eso se le llama olvido y suele ser más devastador que el rito de las despedidas.
Yo prefiero las bienvenidas...
(Se te extrañaba).
Espero que el conte no tingui res a veure amb la teva vida perquè és molt trist, potser perquè la buidor m'espanta.
TRISTANCIO:
Qué razon tienen tus palabras... y qué demoledoras...
Yo también extrañaba este espacio y a los que en él me visitan...
________________________________
DERIC:
No et preocupis per aixó, no te res a veure...
Abraçada!
Publicar un comentario